No pierdas tráfico: una guía de introducción a las redirecciones HTTPS

En esta guía, desglosaremos todo lo que necesita saber sobre las conexiones HTTPS, cómo las redirecciones pueden beneficiar a la mayoría de las organizaciones y las mejores prácticas que puede aplicar hoy.

Descubre la conexión más segura a internet: HTTPS
HTTPS es la sigla inglesa de «protocolo seguro de transferencia de hipertexto». Las páginas web que visitas pueden llevar HTTP o HTTPS antes de su nombre de dominio. A grandes rasgos, estos protocolos son una herramienta que establece una conexión entre el navegador y el sitio web. Esta conexión puede ser segura o no segura, en función de si se usa HTTP o HTTPS.
Las conexiones HTTP no están cifradas, lo cual implica que cualquiera puede ver la información del usuario que visita la página. En cambio, HTTPS usa certificados SSL para cifrar las conexiones y así proteger a los visitantes.
Esta capa de seguridad adicional es la razón por la que HTTPS es ya un requisito estándar para sitios web. Los sitios que usan conexiones HTTP no seguras juegan en desventaja en los motores de búsqueda de Google y algunos navegadores incluso solicitan a los usuarios que cierren las páginas HTTP.
A continuación presentamos una breve infografía que desgrana las diferencias entre las conexiones HTTP y HTTPS:

A la vista de esto, está claro por qué HTTPS se ha convertido en el estándar del sector. Un sitio web solo funcionará correctamente si usa el protocolo HTTPS. Ahora ya conoces el significado de «HTTPS» en «Redirección HTTPS». Pero ¿qué es una redirección? Te lo explicamos.
¿Qué es una redirección HTTPS y cómo funciona?
Una redirección web, o redirección a secas, es una herramienta sencilla que lleva a los visitantes que consultan la página A automáticamente a la página B. Quizás alguna vez hayas observado que escribes un nombre de dominio en el navegador y apareces en otra página web. Pues eso lo hace una redirección.
Hay tres tipos de redirecciones:
• Redirección permanente (301): dice a los motores de búsqueda que esa página web se ha movido de aquí allí de forma permanente.
• Redirección temporal (302): dice a los motores de búsqueda que el tráfico se moverá de aquí allí de forma temporal, porque hay una campaña en marcha, se está haciendo alguna prueba u otro motivo.
• Redirecciones ocultas: este tipo de redirección se usa para que el visitante no pueda ver la URL de destino real. El dominio que haya introducido el usuario no cambiará, pero se mostrará otro contenido.
Las redirecciones suelen utilizarse en toda la web. Sin embargo, por varias razones que veremos en la próxima sección, los servicios de redirección web tradicionales pueden fallar. De pronto, los visitantes potenciales se encuentran con un mensaje de advertencia que les impide acceder al sitio web que quieren ver. Esto no ocurre cuando se implementa una redirección HTTPS, ya que protege todas las conexiones y garantiza que los usuarios siempre llegan a su destino.
Juntemos las piezas: redirecciones HTTPS en pocas palabras
Una redirección HTTPS funciona básicamente igual que una redirección tradicional, es decir, lleva al usuario del sitio web A al sitio web B. Sin embargo, utiliza la potencia de HTTPS para garantizar siempre todas las conexiones.
Los servicios de redirección tradicionales solo cubren el tráfico HTTP, mientras que una redirección HTTPS moderna abarca tanto el tráfico HTTP como el tráfico HTTPS. De esta manera, garantiza que el 100 % de los visitantes acceden a una versión cifrada y fiable de tu sitio, independientemente del enlace que hayan utilizado.
Profundicemos un poco: la diferencia entre las redirecciones tradicionales y HTTPS
Las redirecciones tradicionales solo funcionan con garantías cuando un usuario introduce un dominio que empieza por HTTP. Si un usuario escribe un dominio con HTTPS, podrían aparecer advertencias o errores. A fin de evitar esto, las organizaciones que usan reenvíos web tradicionales tienen que comprar más certificados SSL para que sus enlaces antiguos sigan funcionando.
Por el contrario, las redirecciones HTTPS ofrecen una solución moderna y segura que gestiona automáticamente el tráfico HTTP y HTTPS. Esto es así porque, cuando el enlace anterior no tiene ningún certificado SSL, el servicio de redirección lo emite automáticamente para garantizar que los usuarios disfrutan de una experiencia segura y fluida, sin advertencias del navegador ni obstáculos técnicos.

¿Qué pasa si no tengo HTTPS configurado en mis enlaces de redirección anteriores?
Los navegadores modernos, como Chrome, Safari y Firefox, consideran que los enlaces HTTP no seguros son amenazas potenciales.
En consecuencia, si alguien usa un enlace HTTP antiguo o un enlace HTTPS sin certificado SSL para acceder a tu sitio, podría encontrarse errores del tipo «No se puede acceder a este sitio web» o advertencias del navegador como «No es seguro».
A continuación se muestra un ejemplo de lo que un usuario podría ver al visitar un sitio web HTTP o un sitio HTTPS que no cuente con un certificado SSL válido.

Las advertencias pueden hacer mucho daño a tu sitio web. Los servicios de redirección web tradicionales no están diseñados para proteger y gestionar el tráfico. De todas formas, si estás decidido a usar redirecciones web tradicionales, hay una solución para evitar estas advertencias del navegador. Pero debes saber que esta solución no es fácil de implementar y, además, resulta bastante cara.
El coste de mantener HTTPS en enlaces de redirección antiguos
Muchas organizaciones, a medida que crecen, acumulan diversas versiones antiguas de sus sitios web: de campañas anteriores, marcas antiguas, eventos efímeros… La mala noticia es que cada día miles de personas intentan acceder a estas versiones antiguas de tu sitio desde:
- enlaces antiguos publicados en redes sociales;
- nombres de dominio con erratas;
- mensajes de redes sociales reenviados;
- marcadores antiguos del navegador;
- materiales impresos;
- cadenas de redirección antiguas;
- sitios web de terceros; y
- ¡un largo etcétera!

Esta situación es especialmente problemática para las empresas que tienen varios dominios (p. ej., .com, .net o TLD de país), los distribuidores que gestionan carteras extensas o los propietarios de sitios que están en proceso de renovación de imagen o necesitan redirigir muchas URL antiguas.
Si usas servicios de reenvío web tradicionales, debes asegurarte de que todos estos enlaces tienen un certificado SSL operativo. Recuerda que no tener un certificado SSL equivale a no recibir tráfico en tu sitio web.
Por lo tanto, tendrás que hacer lo siguiente:
- identificar todas las fuentes de tráfico antiguo;
- pagar por certificados SSL para cada tipo de enlace antiguo;
- comprar alojamiento adicional para estos dominios antiguos; y
- comprobar manualmente que todos están actualizados y funcionan bien.
Como ves, hasta hace poco la solución no era asequible ni flexible.
Estos enlaces antiguos pueden atraer un volumen de tráfico considerable. Las publicaciones antiguas en redes sociales, los marcadores o los materiales impresos, por ejemplo, siguen ahí generando tráfico hacia tu web. Pero tienes dos opciones: seguir pagando el alojamiento y el certificado SSL de cada enlace antiguo o simplemente configurar una redirección HTTPS.
Redirección HTTPS: la solución sencilla que abarca todo tu tráfico
Son muchas las organizaciones que, cuando empiezan a configurar una solución, valoran primero los servicios de redirección web gratuitos. Sin embargo, como hemos visto, estos servicios no protegen las conexiones HTTPS por sí solos ni están diseñados para adaptarse al crecimiento del sitio.
Por otra parte, muchas empresas no disponen de presupuesto o mano de obra suficientes para hacer frente al coste y la carga de trabajo que conlleva mantener el alojamiento y los certificados de varios enlaces antiguos. Pero tampoco pueden permitirse perder el valioso tráfico que procede de URL antiguas.
Redirección HTTPS soluciona este problema. Este servicio no solo protege las versiones HTTPS de tu sitio web, sino que también gestiona los certificados SSL automáticamente, lo cual se traduce en un ahorro de recursos económicos y humanos para tu empresa.
Redirección HTTPS es un complemento asequible que:
- instala certificados SSL en tu dominio de forma automática;
- redirige a todos los visitantes mediante HTTPS, independientemente del enlace que hayan usado;
- admite todos los tipos de redirección estándar (301, 302 y oculto); y
- mejora el SEO, la compatibilidad con navegadores y la confianza de los visitantes.
Sabemos que muchas empresas buscan una solución de redirección HTTPS fiable y asequible, que funcione bien pero sea sencilla. Por esta razón, diseñamos un servicio que tiene en cuenta las necesidades del mundo real, es decir, facilidad de uso y herramientas muy potentes que priorizan el rendimiento, la compatibilidad y la confianza.
Prestaciones principales de nuestro servicio Redirección HTTPS
1. Emisión automática de certificados SSL
Cuando activas el servicio, emitimos automáticamente un certificado SSL de confianza de Let’s Encrypt. El proceso tarda alrededor de 15 minutos y no requiere configuración manual.
2. Renovación automática de SSL cada 90 días
Todos los certificados SSL se renuevan automáticamente, evitando así los certificados caducados y las tareas manuales de mantenimiento. Gracias a este sistema mecánico, tu dominio está protegido durante todo el año (incluso si te olvidas de que lo tienes).
3. Compatibilidad total con redirecciones 301, 302 y ocultas
Elige el tipo de redirección que cubra tus necesidades empresariales.
Tipo de redirección | Caso de uso | Optimización para SEO |
301 (permanente) | Migración de dominios y consolidación de marca | Sí |
302 (temporal) | Mantenimiento y pruebas A/B | Limitada |
Oculta | Enmascara el contenido de destino con tu dominio visible | No recomendable para SEO |
4. Activación y desactivación en lote
Usa nuestra herramienta de activación en lote para aplicar redirecciones HTTPS en cientos de dominios a la vez. Esta prestación es ideal para distribuidores de dominios, agencias que gestionan varios clientes y empresas que tienen variantes de marca (p. ej., mimarca.com, mimarca.fr o mimarca.io).
5. Estado de suscripción y monitorización de SSL
En el panel de suscripción integrado puedes comprobar el estado y la validez de los certificados SSL, supervisar el tipo de redirección y su comportamiento o hacer un seguimiento de las fechas de caducidad.
6. Integración de DNS perfecta
Redirección HTTPS funciona de manera nativa en nuestros ajustes de DNS. No necesitas plugins de terceros ni servidores, y te ahorras muchos quebraderos de cabeza por cuestiones técnicas. Activa el servicio en tu panel y deja que nos ocupemos del resto.
Pongámonos técnicos: cómo cooperan SSL y la redirección HTTPS
Ya hemos explicado que los certificados SSL son archivos digitales que protegen la conexión entre tu sitio web y sus visitantes mediante el cifrado de los datos en tránsito. Los certificados SSL forman parte de las conexiones HTTPS, son la «S» de HTTPS. Sin embargo, no pueden dirigir el tráfico a tu sitio web por sí solos.
Si ya tienes un certificado SSL para tu dominio principal, aún te falta la otra parte de la ecuación. Los certificados SSL protegen tu sitio web y las redirecciones HTTPS protegen todo el tráfico que se dirige a tu sitio web.
El funcionamiento es el siguiente:
- Una vez que se ha activado una redirección HTTPS, el sistema provee un certificado SSL gratis para tu dominio, para lo cual recurre a LetsEncrypt y ZeroSSL como autoridad certificadora.
- La propiedad del dominio se valida colocando un archivo de verificación oculto en tu servidor, sin ningún tipo de intervención por tu parte.
- Después, LetsEncrypt y ZeroSSL buscan este archivo, lo verifican y, seguidamente, se emite e instala el certificado.
- A partir de este momento, todas las solicitudes entrantes se redirigen siempre a la versión HTTPS de tu sitio mediante los tipos de redirección estándar (301, 302 u oculta, según tu configuración).
- Además, el sistema supervisa la caducidad del certificado y lo renueva automáticamente cada 90 días, a fin de garantizar una seguridad sin interrupciones ni tareas de mantenimiento constantes.
4 ejemplos reales de cómo se usa HTTPS Redirect
1. Dominios antiguos aún activos
“La gente seguía haciendo clic en nuestros enlaces viejos.”
Alex detectó tráfico proveniente de antiguos nombres de producto, campañas pasadas y dominios mal escritos. Algunos mostraban advertencias de seguridad.
Con HTTPS Redirect, ahora todos esos enlaces redirigen de forma segura.
2. Rebranding o cambio de dominio
“Cambiamos de dominio y perdimos todo el tráfico.”
Miguel hizo un cambio de marca sin redireccionar correctamente. Las visitas bajaron, los errores aumentaron.
HTTPS Redirect solucionó todo en minutos.
3. Campañas promocionales
“Gran dominio para la campaña, pero pésima primera impresión.”
Lisa lanzó una promoción con un dominio nuevo, pero los navegadores mostraban advertencias.
Con HTTPS Redirect, lo solucionó al instante.
4. Solución rápida sin necesidad de hosting
“Necesitábamos una redirección segura y sencilla, ya.”
Dan compró un dominio para un evento, pero no quería configurar hosting ni SSL.
Con HTTPS Redirect, lo activó con un par de clics.
¡Activa tus redirecciones HTTPS hoy mismo!
Los navegadores actuales esperan sitios HTTPS por defecto. Si no lo tienes, puedes perder tráfico, confianza… o ambos.
No contar con un servicio de redirección profesional ya no es solo un problema técnico: es un riesgo para tu negocio.
Ya sea que administres un solo dominio o cientos, la redirección HTTPS es la forma más simple y económica de asegurar cada visita.
Protege hoy el tráfico de tu sitio web con el servicio de redirección HTTPS de EuroDNS.
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